Hay personajes en la literatura universal que cruzan las fronteras de las historias para las que fueron creados, a tal punto que terminan siendo más populares que dichas historias. El mago Merlín es un buen ejemplo de tales personajes.
El rol de tutor sabio del mago Merlín, de encargado (por designio de un poder superior o por propia determinación) de que se cumpla el destino de grandeza de un futuro héroe o líder popular, es funcional a muchas tramas aventurescas; particularmente aquellas que dan forma a novelas épicas. Personajes tan dispares como Gandalf, de El Hobbit y El señor de los anillos; o los caballeros Jedi Obi Wan Kenobi, Qui-Gon Jinn y Yoda, de La guerra de las galaxias, comparten con Merlín ese rol de tutores sabios y dotados de poderes mágicos.
La historia de Merlín está fuertemente ligada a la leyenda del Rey Arturo. La primera descripción del personaje es la que aparece en la obra Historia Regum Britanniae (Historia de los reyes británicos) de Geoffrey de Monmouth, escrita allá por el año 1136. Geoffrey habría compuesto la descripción de Merlín combinando a un personaje mítico galés –conocido como Myrddin Wilt– con el líder guerrero romano-bretón Ambrosius Aurelianus.
El rol de tutor sabio del mago Merlín, de encargado (por designio de un poder superior o por propia determinación) de que se cumpla el destino de grandeza de un futuro héroe o líder popular, es funcional a muchas tramas aventurescas; particularmente aquellas que dan forma a novelas épicas. Personajes tan dispares como Gandalf, de El Hobbit y El señor de los anillos; o los caballeros Jedi Obi Wan Kenobi, Qui-Gon Jinn y Yoda, de La guerra de las galaxias, comparten con Merlín ese rol de tutores sabios y dotados de poderes mágicos.
La historia de Merlín está fuertemente ligada a la leyenda del Rey Arturo. La primera descripción del personaje es la que aparece en la obra Historia Regum Britanniae (Historia de los reyes británicos) de Geoffrey de Monmouth, escrita allá por el año 1136. Geoffrey habría compuesto la descripción de Merlín combinando a un personaje mítico galés –conocido como Myrddin Wilt– con el líder guerrero romano-bretón Ambrosius Aurelianus.