Un buen regalo del día de los enamorados no tiene que ser caro ni ostentoso. Solamente tiene que provenir del corazón. Por eso compartimos esta simple pero significativa pieza del genio Gustavo Adolfo Bécquer, para que cada uno/a lo regale a su media naranja.
Compartimos el poema "Amor eterno", de Gustavo Adolfo Bécquer. Es muy breve pero transmite un mensaje poderoso, por lo que resulta ideal para memorizarlo y recitárselo a esa persona especial en la que piensas durante el día de los enamorados:
Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor.
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