Google dedicó uno de sus "doodles" a celebrar el supuesto día de los jardines en Alemania. Después de una intensa búsqueda, no encontramos ninguna referencia que hablara de esa festividad, ni que afirmara que el 10 de junio se celebra el día de los jardines, o de los enanos de jardín, en alguna parte del mundo. Pero, ya que Google le dio tanta importancia al asunto, aprovechamos para contarles la historia de los enanos de jardín y de cómo se hicieron tan populares.
Había una vez un escultor alemán, llamado Phillip Griebel, que vivía en la ciudad de Gräfenroda, dentro del estado minero de Turingia. Phillip (junto con otros artesanos de la zona) comenzó a fabricar de manera artesanal muñecos de arcilla con forma de enanos o gnomos; con barbas blancas y largas, y sombreros puntiagudos. Sabiendo que los gnomos son protectores de la naturaleza, se difundió en todo el país la leyenda de que los enanos de jardín protegían a éstos por las noches y traían buena suerte. El hecho de que hayan surgido en la región minera de Turingia tiene sentido por que se sabe que los enanos de los cuentos son hábiles e incansables mineros.
Griebel fundó su propia compañía de muñecos de arcilla en el año 1874. A partir de allí, los enanos de jardín se difundieron rápidamente todo a lo largo de Alemania, y luego conquistaron Francia, Inglaterra, y todo lugar en donde la jardinería sea un hobby de importancia. Los herederos de Griebel siguen fabricando hoy en día en Alemania los famosos muñecos; de hecho, son los únicos fabricantes que los siguen produciendo en ese país, dado que el resto de los fabricantes migraron su producción a países con costos laborales más bajos, como Polonia o China.
Había una vez un escultor alemán, llamado Phillip Griebel, que vivía en la ciudad de Gräfenroda, dentro del estado minero de Turingia. Phillip (junto con otros artesanos de la zona) comenzó a fabricar de manera artesanal muñecos de arcilla con forma de enanos o gnomos; con barbas blancas y largas, y sombreros puntiagudos. Sabiendo que los gnomos son protectores de la naturaleza, se difundió en todo el país la leyenda de que los enanos de jardín protegían a éstos por las noches y traían buena suerte. El hecho de que hayan surgido en la región minera de Turingia tiene sentido por que se sabe que los enanos de los cuentos son hábiles e incansables mineros.
Griebel fundó su propia compañía de muñecos de arcilla en el año 1874. A partir de allí, los enanos de jardín se difundieron rápidamente todo a lo largo de Alemania, y luego conquistaron Francia, Inglaterra, y todo lugar en donde la jardinería sea un hobby de importancia. Los herederos de Griebel siguen fabricando hoy en día en Alemania los famosos muñecos; de hecho, son los únicos fabricantes que los siguen produciendo en ese país, dado que el resto de los fabricantes migraron su producción a países con costos laborales más bajos, como Polonia o China.